20 jun 2009

Mares y más mares.


Dónde empieza y termina un mar? a caso existen límites reales para poder diferenciarlos uno de otro, los océanos no siguen siendo mares?

Tenemos que poner siempre nombre a todo. De lo contrario no nos quedamos contentos. Deberíamos disfrutar de las cosas sin llegar a separar tanto unas de otras. Pero no somos así, nos gusta tener que complicarnos la cabeza para poder dividir, separar y repartir los trozos en su "justa" medida...

Y cuando no sabes como llamar a las cosas, cuando no sabes que nombres poner... es como si faltara algo de ti, por esa "costumbre" que nos han impuesto...

4 comentarios:

Cálida Brisa dijo...

Mi niño
No se puede nadar contra corriente, la vida es asi...hay que dividir, repartir y organizar..hay que dejarse llevar algunas veces y no resistirse, acabas agotada para nada.

Te quiero con toda mi alma..y mi alma te extraña cada vez más el dia que pasa, quisiera tenerte cerca y hablar de lo que quisieramos cambiar...somos uno soñadores los dos que pensamos que vamos a lograr cambiar el curso de alguna cosa que no nos agrada.

Besos

Paquita

Willow dijo...

Hola amigo,

¿Puedes pasar por mi blog, por favor? Te he dejado algo allí.

Es lamentable porque está en nosotros pero, como tu nombre bien indica... te puedes escapar! Es decir, puedes comenzar a pensar de otra manera, nadie te lo impide, sólo tú mismo.
Besos,
Ana

Anónimo dijo...

sabes? yo soy de las que siempre han querido etiquetar las cosas, me autoconvencí de que no era la mejor forma de vivir, hasta que me di cuenta que etiquetando jamás me equivocaría con la sal y el azúcar, que amb@s tienen el mismo color, pero no sabor.
Un abrazo.
Te echo de menos

Narkia

Willow dijo...

Bueno, pues aquí estoy de nuevo... ¿Te has dado cuenta de que hace 1 mes que escribiste esto? ¿Estas de vacaciones? Si es así me disculpo pero no tardes mucho en escribir, en este tiempo habrán pasado cosas. Mira lo positivo de ellas. Se nota que estoy "optimistic"?? Un beso